Algunas personas pensaron que le habían hecho una oferta irresistible a Sam Chand cuando lo invitaron a hablar en un evento de dos días en el extranjero. Después de todo le estaban pagando su viaje en primera clase y alojamiento para el y su esposa, además de un generoso honorario. Pero el Señor Chand no aprovechó la oportunidad. En cambio, el estaba más interesado en “el impacto existencial a largo plazo” que pudiera tener en las personas que asistirían al evento. Su pregunta a los organizadores del evento fue “¿Me dará cada actividad la oportunidad de influenciar a personas influyentes? En vez de un evento singular de liderazgo, ¿podría yo ser parte del viaje del líder?” Después de todo el liderazgo es un proceso continuo. 

En vez de oro y gloria la misión del Señor Chand era desarrollar relaciones significativas. El buscaba tener un efecto más profundo y duradero en sus oyentes que a su vez impactaría a sus seguidores. 

El Señor Chand cree que nuestras percepciones y patrones de pensamiento determinan nuestras emociones, valores y creencias y por ende determinan cómo respondemos a la gente y los eventos. A veces ni siquiera somos conscientes de las razones detrás de lo que decimos y hacemos porque acarreamos patrones y hábitos emocionales arraigados desde nuestra infancia.

Pero a pesar de cada comportamiento aprendido y de nuestro proceso de pensamiento, el especialista en el liderazgo cree que usted puede Pensar Diferente y Vivir Diferente. El está decidido a ayudar a la gente a ir más allá de objetivos específicos y considerar objetivos y resultados claves, desafiarse a sí mismos, hacer preguntas cruciales, y “actualizar el software” en sus cabezas. A través del libro Piensa Diferente Vive Diferente, el Señor Chand espera ayudar a los demás a “pensar más profundamente, más claramente y de manera más productiva que nunca antes.”